Es habitual encontrar niños jugando en las calles del barrio. Entre las dificultades para transitar con el auto tal vez sea la mas preocupante. Siempre me pregunto ¿Porque los padres de esos niños permiten que aquello mas preciado en la vida, los hijos, estén expuestos al peligro latente de un atropello?
Me imagino un posible escenario: "Hay vehículos estacionados junto al cordón. De repente sale un niño corriendo detrás de una pelota de entre los autos estacionados y, o casualidad, venía transitando correctamente un vecino que se encuetra repentinamente con el ñiño frente de sí. Confiado el niño de jugar habitulmente en la calle avanza despreocuapado, pero con la diferencia de que en esta oportunidad avanza también un auto por su camino".
No es necesario aclarar el resultado. Jugar con fuego tiene sus consecuencias.
No es necesario aclarar el resultado. Jugar con fuego tiene sus consecuencias.
Un vehículo tiene un peso promedio de 1500 Kg y a una velocidad de 30 Km/h puede causar leciones graves, incluso la muerte. Estos niños en realidad están jugando a la ruleta rusa, por supuesto sin saberlo debido a su inocente igenuidad, pero los padres principales responsables deben saber protegerlos de riesgos innecesarios. Realmente no tiene justificación porque cada vivienda en el barrio cuenta con espacio suficiente para satisfacer las necesidades de los niños. Educar es también marcar los límites y mostrar respeto por los vecinos, que no tenemos porque circular con el temor de tremenda fatalidad.
Pareciera que nadie en el barrio toma conciencia de la situción y como siempre habrá que esperar una tragedia para que alguien tome cartas en el asunto.
Lamentable esta es la actitud que muestra la experiencia.
Lamentable esta es la actitud que muestra la experiencia.
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